Debido al temporal, el invierno se anticipa al mes de octubre trayendo un descenso importante de las temperaturas y provocando cortes de carreteras, líneas de tren suspendidas, aviones que no pueden volar e importantes apagones y cortes del suministro eléctrico a causa de algunos tornados, pero sin duda el principal protagonista ha sido el frío.

Las copiosas nevadas han sorprendido especialmente al tercio norte de la península provocando precipitaciones que han cubierto con un blanco manto a numerosas poblaciones y han provocado cortes de carreteras debido a la caída de árboles. En Asturias, según datos proporcionados por el Servicio de Emergencias del Principado, el temporal ha dejado a más de 15.000 hogares sin electricidad.

Las temperaturas bajo cero han provocado las primeras nevadas en cotas bajas, dejando la cota de nieve entre los 600 y 900 metros pero haciéndose visibles nevadas a tan solo 300 metros sobre el nivel del mar en algunas zonas del Cantábrico según la AEMET (Agencia Estatal de Meteorología). En el Pirineo hay avisos de que las temperaturas podrían llegar a los 8 grados centígrados bajo cero.

Prácticamente ningún lugar se ha librado de este temporal de frío y lluvia que ha barrido el territorio español dejando importantes precipitaciones y nevadas, llegando a provocar avisos amarillos en algunas poblaciones debido a las fuertes lluvias. El viento también ha sido uno de los protagonistas durante estos días.

Todas estas precipitaciones en forma de agua o nieve aseguran el buen momento que viven los embalses y pantanos españoles que tienen la reserva de agua más alta registrada desde los últimos 25 años para estas fechas. Muchos de los embalses se encuentran a más de un 75 por ciento de su capacidad máxima.

El año hidrológico da comienzo cada día 1 de octubre y registra el estudio del estado de las cuencas hidrográficas y las abundantes precipitaciones caídas a lo largo de todos estos meses han provocado el registro de aportaciones más elevado en más de 50 años.

Esta situación provoca que en la actualidad no exista ningún tipo de preocupación en el territorio nacional por peligro de sequía o corte de la red de suministro. Los embalses presentan niveles óptimos a las puertas del invierno.