Para Coca-Cola, el agua es un elemento fundamental, algo totalmente necesario. Y nada más y nada menos, por el simple hecho de que es su principal ingrediente, además de ser un recurso natural escaso actualmente en España.
Con el paso de los años, se ha podido ver con claridad la evolución del ahorro desde 2010, cuando Coca Cola usaba 2,18 litros, por cada litro de refresco que fabricaba, lo cual también incluye al propio agua del refresco, que en la actualidad utiliza 1,91 litros. Por ello, se pretende mejorar la eficiencia del agua, aproximadamente hasta 2020 en un 20% respecto al 2010.
Los productos fabricados por Coca Cola que más consumen son los envases rellenables de vidrio (utilizados en bares y restaurantes) en proceso de lavado. La optimización de dicho proceso, es estrictamente necesaria, ya que son lavadoras muy grandes con un coste elevado. Es por eso que, se ha logrado rebajar el consumo de agua gracias a los ajustes, realizados en los inyectores.
Por otro lado, uno de los sistemas empleados es la reutilización, algo muy presente y una de las principales vías de la empresa emprende para poder reducir el consumo del agua en la producción de sus bebidas. Por ejemplo, las botellas de plástico, se soplan en la misma planta, y poco después vienen las preformas limpias por partes del proveedor y protegidas, de manera que cuando se vayan a enjuagar, el agua siga teniendo una buena calidad. Además puede ser reutilizada para otro proceso, mediante un pequeño tratamiento.
Y como bien asegura la ingeniería industrial Coca Cola está comprometida al 100% con su entorno, ya que tiene un sistema de gestión ambiental propio, y más exigente de lo normal, a parte de tener una certificación ISO 14001 en todas sus fábricas.
Sus trabajadores están muy bien concienciados y sensibilizados, pues, reciben unos cursos sobre capacitación en el medio ambiente, y es gracias a estos pequeños detalles, que se consigue conservar de forma óptima, un recurso tan importante como lo es el agua. Y gracias a sistemas como la doble ósmosis inversa que hay en la fábrica de Barcelona, todos estos procesos resultan ser finalmente mucho más eficientes y beneficiosos para todos, de manera que si la primera falla o muestra rechazos, se reutiliza el agua aplicando una segunda ósmosis.