En el ámbito hostelero es importante tener muy presente la calidad del agua. Para ello es necesario tener en cuenta algunos factores que no siempre se conocen dentro del sector. Por ello, en el artículo de hoy, te vamos a contar cuáles son los aspectos fundamentales a tener en cuenta sobre el agua en tu negocio.
¿Cómo regular la calidad del agua?
Según el Real Decreto 902/2018 se deben tener en cuenta diferentes factores para la regulación de la calidad del agua en hostelería: el análisis, el mantenimiento de los depósitos y las tuberías, su origen y la revisión y limpieza de los aparatos que empleen agua.
El resultado del análisis debe ratificar que no existen microorganismos peligrosos, como las bacterias o los protozoos, que puedan alterar las propiedades del agua.
Con respecto al origen del agua está claro que muchos establecimientos utilizan agua embotellada para la venta. Sin embargo, es de igual importancia el agua que se emplea para cocinar o lavar la vajilla.
Para asegurar que esta no está contaminada es necesario realizar inspecciones periódicas de los depósitos de agua y las tuberías. Adicionalmente es necesaria la revisión de los aparatos que usan agua, como por ejemplo la cafetera o el lavavajillas, y realizar una correcta limpieza.
¿Cuál es la mejor opción?
Ahora que conocemos cuales son los distintos factores que se deben tener en cuenta para conocer la calidad del agua, se plantea una cuestión: ¿es mejor el agua embotellada, filtrada o del grifo?
A la hora de cocinar es habitual que las personas piensen que el agua del grifo tiene los correctos niveles para su uso sin peligros. Sin embargo, no se percatan que pueden existir riesgos por la propia instalación, que afecta directamente a la calidad del agua.
Por ese motivo se recomienda el uso de agua filtrada para el sector hostelero. Es una manera sencilla de evitar riesgos y problemas.
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